LA MASCARA...

Hay días en los que te levantas mejor que otros. Y aunque soy muy negado para las nuevas tecnologías, agregar al Scar-Frances, Olivier, en el Facebook, a las 7.30 de la mañana, no deja de ser, hasta el momento, un buen principio de día.

Y quien es él? Sencillamente, y bajo mi humilde punto de vista, el mejor Scar hasta el momento, y mi predecesor en la mascara.

La mascara....Dejarme que os hable de ella.

Sinceramente, impresiona tanto en un primer momento, que no voy a negar mi nerviosismo y un ápice de respeto. Pero su cara, los trazos irregulares que la componen, sus colores, sus movimientos abruptos, y esa colección de infinitas posibilidades en sus movimientos, hacen del trabajo diario, un aprendizaje constante. Y es que no hay para menos.

Aun cuando todo un mundo de sensaciones acompañan a mi voz en una lectura, y dejarme que remarque, con una excelente traducción de Jordi Galceran, no deja de ser solo una parte del gran puzzle que lo compone. La mascara, tiene vida, y mis pensamientos se trasladan a ella, cobrando movimiento, unas veces lleno de sarcasmo, otras de ironía. Puedes rascarte con ella el hocico, enfrentarte en postura de ataque a Mufasa, y hasta seducir a Nala. Y he de reconocer que aunque es móvil, a veces en los pequeños gestos, en la sutileza, esta la solución.

La mascara no sube ascensores, ni pasa por debajo de puertas. No lo intentéis, en esos espacios no se siente cómoda, ella necesita respirar, acompañarse de su bastón, para ejercer la maldad, ese contrapunto del bien y el mal, que has de buscar desde la honestidad del trabajo, pero que evidentemente has de poseer. La mascara mira por encima del hombro, observa con detenimiento a todos los seres que la rodean, juega si tu quieres, pero cuidado que también se enfada, se burla de ti, se pelea y aunque sientes que es domable, estas equivocado, ella es capaz de trasladaste a un mundo cruel al que hay que estar preparado. La mascara es libre y no ejerce los mismos movimientos en todas las producciones, por supuesto, por eso es, simplemente, excepcional y única.

La mascara también descansa, duerme y organiza en su mente un plan. Maquiavélica y señorial, rebelde y despiadada, modesta pero sencilla, pasional en su lucha, pero no desbordante, incrépita y solitaria, buscara el poder en cada ser, aliados que utilizara a su antojo, esa es mi mascara, una amiga con la que he de andar con mucho cuidado, esplendida en su trabajo, fastuosa en sus dialogos, pero indomable como un leon. Con ella luchare, sacare todas mis fuerzas y me submergire en su mundo. Solo puede haber un vencedor, y ese seré yo. Ahora estoy preparado. Quiero poseerla en su locura, en su perversidad, y bajo su influencia, crear mi propio Scar.

Y poder llegar a decir... Be prepared!